desterrando los pulmones el desierto,
instan las señales de estas tierras
ondeando entre las dunas, cruel el viento
sangrandose en los coágulos que las heridas liberan.
Nacen estrellas en el otro lado del cielo
implosiona el universo en las ramas de esta hoguera
cantan cargando la calma:
olivos, aceites, el pan, la mentira
Tambores resoplan, paciencia no espera
increpa la noche, renuncia se queda
no queda ya nadie, se limpia la senda
Acallan las voces...y la luna mengua.
mou de lugh