no se si fué en Beirut o en Barcelona
donde reencontré con gracia
el vuelo azul cielo de tus ojos en mi falda,
aunque llevases pantalones
y los bocadillos de fresas verdes
descansaran en mi espalda.
Y sin embargo, qué necesario!
porque dos monociclos
no hacen una bicicleta
y porque los bares sin nombre
siguen siendo cuna y resguardo
de físicos, psiquicos y poetas.
y sin embargo, que necesario!
sentir el fresco del invierno
tumbado sobre una oveja
y saber,
que ya no corren
los toros sobre las plazas,
y sentir,
los susurros marineros
y con ellos su salitre,
y cómo el sudor petrifica las redes
para dejar plantado un clavel en tu terraza.
y sin embargo, que necesario!
que despertara el sol en un dintel
tras viajar en un tren sin almohada,
y a la aventura,
dejar fluir al mañana
para que recorra un gótico en goleta
museos de arte contemporanea.
y sin embargo, que necesario!
cruzando el mundo y la tierra
cuando deben ser cruzados.
y sin embargo, qué necesario!
como la última vez
cerrar con punto y coma,
para plegar un mapa
o un país entero
o un sin embargo de Sabina
o un sin embargo sin te quiero
o un sin embargo volvería
o un sin embargo no puedo.
y sin embargo, que necesario!
recorrer las discordancias
y conversar sobre la loma
para que las notas que escribes
sueñen
entre Nantes y Barcelona.
mou de lugo
